Cierto día un granjero se dirigió muy preocupado donde estaba Buda hablando con sus monjes sobre lo material y lo espiritual, sobre el desprendimiento y las emociones. El granjero le preguntó muy entristecido: - He perdido quince vacas y por el disgusto estoy a punto de morir, si las has visto dime por favor donde están. Buda le miró fríamente y le dijo: - Aquí no están tus vacas, busca en otro camino. El granjero se marchó con sus preocupaciones a cuestas y Buda entonces sentenció a sus monjes: - Tenéis mucha suerte porque no tenéis vacas.
Una madre es alguien que te quiere por lo que eres, y no por lo que tienes o sabes. Alguien que trata de entenderte, que se interesa por tus cosas, aunque sean pequeñas. Es quien se acuerda de ti cuando no estas, y que no te deja cuando fracasas.
Una madre es alguien que te levanta el ánimo si lo necesitas, con quien se puede bromear sin que se enoje. y que se acuerda de ti cuando reza, Una madre comparte tu soledad y tu tristeza, así como tus alegrías y tus sonrisas. Es alguien que se lanza contigo a correr riesgos, y quien nunca te negará su ayuda.