jueves, 20 de abril de 2017

Perla 299

El corazón humilde 
deja que las cosas que no se pueden cambiar,
sean como son

jueves, 13 de abril de 2017

Una gota de agua



Una gota de agua vio la tierra reseca y sedienta, y pensó:
- Si yo fuera manantial, podría refrescar las plantas y los árboles que estuvieran a mi lado.
Fue tan intenso su deseo que la gota de agua se vio convertida en fresco y burbujeante manantial.
¡Qué feliz se sentía, refrescando la vegetación cercana!.
Pero el manantial vio que más abajo también había flores y más árboles, intentó liberar unos hilillos de agua por sus bordes, pero fue inútil, sólo formó pequeñas charcas donde bebían los pajarillos.
- ¡Ay!, se lamentó. Si fuera torrente, me precipitaría monte abajo y refrescaría muchas más plantas y tierras.
Su pensamiento se hizo realidad, dejó de ser manantial y se transformó en torrente.
¡Qué impetuoso gozo sintió!.
Pero lástima.....
- Soy tan corto...., mis ilusiones acaban donde comienza el río. ¡Ah, si fuera río!.
Y el torrente pasó a ser un abundante río.
Regó grandes extensiones, refrescó sotos, vegas y campos labrantíos, los prados reverdecieron, también las huertas y los trigales por donde pasaba; siempre se mostraba generoso y a nadie le negaba su líquido.
Un buen día el río se encontró con el mar y tuvo envidia de su inmensidad, de la suerte que tenía el océano de bañar tantas costas. Si el fuera el mar....
Su anhelo se hizo realidad, ahora era mar, por sus aguas nadaban cantidades ingentes de peces y bañaba todas las tierras del litoral.
Pero llegó el momento en que se sintió cautivo, por ningún sitio podía escapar, por eso quiso ser playa, saber qué había más allá.
Una ola del mar se adentró en una extensa playa de arena, arena, sólo arena.
El sol calentó la arena hasta abrasarla. La arena sollozó:
- Si al menos tuviera una gota de agua para refrescarme....
Una nube generosa regaló una gota de agua de lluvia a la arena reseca.
Al sentir tanto alivio, la arena deseó ser gota de agua y su petición también fue escuchada, la gota de agua del principio volvió a ser nada más y nada menos que una sencilla gota de agua.